LA COMIDA QUE SE EVOCA
En estos días que se acercan del verano , y en conmemoración a mi madre por sus cumpleaños(el viernes próximo).
Madre, tú que hiciste que recordará el porque quiero la historia , en esta humilde participación del blog habló de algo que siempre lo relacionó a lo más íntimo de nosotros mismos(la comida).
Desde la infancia , aprendemos a comer conforme a las circunstancias familiares, el gusto a cierto alimento se debe a lo que nos remite.
El recuerdo perenne de ciertas cosas que me gustan lo relaciono a momentos muy específicos de mi vida.
Comida relacionada a mariscos me recuerda a mi papa ya que con el y mi madre comía eso ciertos días cunado era muy pequeña. Comer nopales y elotes lo relaciono a esa parte originaria(la que esta adherida a mi amada abuela materna y esos sencillos gustos pero que resultan ser lo más rico)quesadillas y antojitos a esa parte donde estaba en el vientre de mi madre (ella comía eso ) y también a mi tierna infancia cuando era demasiado pequeña y apenas alcanzaba una mesa .
Son tantas coas que te puede remitir un alimento , te lleva a un pasado no tan lejano , un lugar que puede ser tan dulce y memorable , un instante que se fugó o un momento que remite tristeza, etc.
Las microhistorias que remiten a los alimentos nos llevan a aspectos como mencione específicos.
En mi caso lo llevó a narraciones que me cuenta mi madre de mis antepasados , lo oigo , me deleito y entiendo que lo que me cuenta es parte de lo más querido, lo más entrañable lo que puede llevar un recuerdo a remitir como el maíz, los nopales , capulines ,pescado seco , etc
llevan un pedazo de pasado familiar y esos fragmentos los llevó en el fondo de mi corazón porque eso es historia familiar y que reconozco como parte de mi. Es el origen de mi persona y esas comidas y lugares las atesoró muy dulcemente .
Ese maíz que es el más sabio de los alimentos , tan generoso ,que no se desperdicia y el nopal que puede ser espinoso pero es tan valioso en su sabor .
Por esos alimentos y su recuerdo estoy más que agradecida y se lo debo a mi madre que me enseñó a valorar y comprender que no solo la comida esta hecha de sabor sino del amor que le das a los alimentos.
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